Vivir sin efectivo: Reto y audacia del gobierno y pueblo bolivariano
Publicado: 17/12/2019 06:19 PM
En Venezuela, el problema de conseguir efectivo sigue siendo una situación que acalora a la población en las entidades bancarias quienes establecen montos diferentes para complacer a la clientela en su batallar diario para el desenvolvimiento cotidiano.
Muchos anhelan regresar a momentos donde obtener efectivo no implicaba dirigirse a una agencia bancaria, más bien la visitabas para depositar lo que ibas acumulando en casa, y si ejercías una actividad lucrativa independiente debías concurrir rápido al banco para realizar depositar el efectivo que acumulabas.
Hoy el dinero en efectivo es casi nulo en la calle, las restricciones bancarias para otorgarlo hacen que muchas personas se restrinjan de salir porque el pasaje en el transporte público cada día aumenta vertiginosamente.
Lo más grave de esta situación es que el efectivo se ha convertido inclusive en un arma para la desestabilización política por parte de quienes aspiran un cambio de gobierno a costa de instrumentos no democráticos.
De hecho, vivimos el grave problema de extracción del efectivo por parte de grupos con intenciones subversivas, por lo que el gobierno nacional debió aplicar una reconversión monetaria al determinar que era casi imposible contener la extracción de efectivo desde Colombia amparada con la logística del propio gobierno neogranadino acostumbrado a conspirar flagrantemente contra el pueblo y gobierno bolivariano.
Pero como de las crisis surgen las mejores estrategias para adecuarse a los avances tecnológicos de sociedades más experimentadas, en Venezuela no solo avanzo en la aplicación de una medida de reconversión monetaria, similar a la aplicada en Alemania por los años de 1940 cuando era atacada inclementemente mediante la desestabilización de su cono monetario obligándola a quitarle hasta 12 ceros a la moneda circulante; sino que se abrió la innovadora posibilidad de concientizar a la población en la disminución del dinero físico otorgando incentivos mediante la utilización masiva del uso de tarjetas de débitos.
También se ha implementado sistemas de pagos mediante el uso de la tecnología como los Biopagos, pago móviles por medio de teléfonos y la migración de un sistema de pago convencional de las transacciones financieras en los bancos comerciales hacia las criptomoneda o cripto activos como el Petro.
No hay duda que la implementación de este sistema de pagos, para pagos mínimos y grandes e inclusos transacciones internacionales con el sistema Petro, ubica a Venezuela en el escenario internacional como un país de avanzada con un sistema de pago en criptoactivo respaldado por recursos naturales que tiene en abundancia y son muy cotizados en el mercado internacional.
Ahora hay que orientar al pueblo para que entienda que el camino de la como estrategia para superar la deficiencia de efectivo y contener los ataques orquestados desde el gobierno colombiano para su extracción por la frontera común, es el adecuado no solo a las circunstancias de escases sino al avance tecnológico que nos empuja hacia una sociedad mundial globalizada.
La experiencia que hasta 2016 tenían al menos diez países con economías sólidas y movimientos financieros confiables basados en transacciones electrónicas e inclusive criptomoneda, dio comodidad, impulso avance tecnológico y elimino grandes costos en el proceso de acuñar monedas o mandar hacer los billetes que no se fabrican dentro de nuestro país.
Tenemos países como Suecia donde hasta para los feligreses pagar el diezmo lo hacen mediante pago móvil, los vendedores informales llevan puntos de ventas y lo que es mejor los comerciantes rechazan aceptar monedas o billetes, un 96% de la población utiliza tarjetas y medios de pagos electrónicos, así como muchas entidades bancarias no dan ni reciben efectivos, lo cual ha contribuido a bajar los niveles de robos bancarios de 110 en 2008 a 16 en 2011.
Esto permite al gobierno tener mayor control sobre las evasiones fiscales, una mayor recaudación tributaria, no usar cajas registradoras para las ventas, a su vez permitirá vencer prácticas ortodoxas de conspiración ya superadas en las grandes sociedades tocadas por la tecnología.
Pero sin embargo, es necesario superar otras barreras tecnológicas hoy en Venezuela, como el problema del internet plenamente en el país, el uso de teléfonos inteligentes y muy importante una campaña de concientización y adiestramiento que estamos seguro será bien recibida por nuestra gente, partiendo de que si fue posible atacar el analfabetismo con programas diseñados por la revolución en el accionar del Comandante Hugo Chávez, también será posible desde las instituciones formativas lograr el adiestramiento y entendimiento del uso de las nuevas tecnologías que nos permitan ubicarnos a la par de las grandes sociedades así como superar métodos arcaicos por el cual, el gobierno cipayo del presidente Iván Duque, vive atacándonos.
En Dinamarca también se ha desechado el uso de efectivo, o en Bélgica que han creado leyes que sancionan a quienes realicen transacciones en efectivo, donde más del 93% de su población no usa efectivo para sufragar gastos.
En países como Reino Unido el pasaje en autobús se cancela con una tarjeta prepago; en Holanda los parquímetros no aceptan monedas; Francia, al igual que Bélgica, pecha a quienes paguen más de 3 mil euros en efectivo, en Alemania, a través de un teléfono inteligente que lea un chip, el comerciante recibe pagos por tarjeta de débito y crédito y en Checoslovaquia, puedes hasta tomar café pagándolo en criptoactivo, mediante chip que ya ni siquiera lo llevas adherido a una tarjeta sino que internamente bajo tu piel como medida de seguridad para que no se te pierda.
Hacia estas prácticas debemos avanzar en Latinoamérica y fundamentalmente en Venezuela, con la plena disposición de la población de trascender hacia el progreso tecnológico que hoy impulsa el gobierno bolivariano con la implementación de los criptoactivos respaldados por el petróleo, oro, coltán y demás recursos naturales valiosos que tenemos en abundancia.
RAFAEL SOSA VARGUILLA
@rafaeliginio