República Dominicana: Los cuadernillos de la discordia y el cuento de “ahí viene el lobo”

Los gobiernos progresistas han sido históricamente acusados de adoctrinar a los niños de sus pueblos, y aunque jamás han conseguido pruebas sobre tal acusación, se ha convertido en un mito urbano a escala mundial. Pero resulta que el cuento de “allí viene el lobo” no es una creación que pertenezca a la izquierda, ni la que ha modificado la historia en los libros de texto de los alumnos de los colegios de esos países. 

Una gran polémica se ha desatado en República Dominicana luego de que se diera a conocer el contenido de unos folletos que acompañan la educación a distancia que se imparte por la pandemia de coronavirus.

El Sars cov-2, mejor conocido como el coronavirus, registró sus primeros contagiados en la cuidad Wuhan, China, en el mes de noviembre del año 2019, propagándose velozmente y siendo la primera pandemia en la historia contemporánea. Es por ello que la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomendó que es de vital importancia guardar distancia y las clases deben tomarse de manera remota para garantizar la salud.

En República Dominicana el Ejecutivo Nacional, a través del Ministerio de Educación, elaboró unos cuadernillos para acompañar a los chamos en sus clases en casa, los cuales tienen contenidos adoctrinadores con abierta ideología de ultraderecha.

En el 6to año de secundaria, se difundió un artículo disfrazado de actividad escolar titulado: “Cómo se lucran las dictaduras en tiempos de pandemia”. Allí se acusa abiertamente y sin fundamentos a países como China, Cuba, Nicaragua, Rusia y Venezuela de ser regímenes dictatoriales, además, de vender personas como esclavos para trabajos forzados y sexuales. De igual manera, están siendo acusados de narcotráfico, así como de activar una especie de conspiración para derrocar gobiernos como los de Chile, Brasil y Colombia, donde los pueblos sí están siendo oprimidos y salen a la calle a expresar su descontento ante los ojos ciegos de los medios de comunicación.

Las polémicas y falsas acusaciones han sido fuertemente criticadas por profesores, gremio agrupado en el Espacio Magisterial Narciso González, quienes solicitaron a la Asociación Dominicana de Profesores un pronunciamiento sobre el contenido del folleto. A su vez, exigen una explicación por el contenido de las propagandas contra otras naciones, declarando que viola el principio de la educación libre. Los maestros aseguran que no creen que el contenido haya sido un pequeño desliz o error de impresión por parte del Ministerio de Educación de República Dominicana, a su vez que lo acusan de ser un Gobierno genuflexo frente a los Estados Unidos y su política exterior.

El polémico contenido es extraído del artículo del periodista Carlos Sánchez Barzaín, quien publica en el Diario Las Américas, que se edita en Miami, Estados Unidos. En dicho texto, se acusa abiertamente y de manera beligerante a los gobiernos de Cuba, Nicaragua y Venezuela de ser dictaduras. El material es usado para que los jóvenes estudien sobre el “Bienestar y Salud integral en tiempos de pandemia”.

El profesor Sixto Gabín, presidente de la Asociación de Profesores Narciso González, asegura que el ministerio colocó el contenido con alevosía y con unas intensiones muy marcadas, por lo tanto propuso solicitar a su órgano rector revisar detalladamente el contenido de los materiales que deberían ser entregados a los estudiantes para seguir su educación.

Gabín recalca que el texto de los materiales representa un “gravísimo hecho”, e implica una descarada propaganda política en contra de gobiernos extranjeros (…) “siendo la República Dominicana una nación democrática y respetuosa del derecho que tienen los países hermanos a la libre elección de sus gobernantes, es inamisible permitir que de manera descarada y burda se utilicen los recursos del Estado Dominicano y el sagrado derecho a la educación de nuestros ciudadanos para atentar contra la libre determinación de los pueblos, el ministerio de educación tiene la clara intención de adoctrinar a los alumnos de República Dominicana en contra de gobiernos progresistas lavarles el cerebro con propaganda anticomunista”.

Las acusaciones fueron evadidas por el Ministerio de Educación de República Dominicana, que se lava las manos ante la polémica que puede incluso acarrear problemas diplomáticos con las naciones que están siendo acusadas en el artículo periodístico.

La directora de Comunicación de la cartera educativa detalló que la decisión de incorporar varios artículos de opinión en un cuadernillo para estudiantes de sexto grado de secundaria, no responde a ninguna posición política o juicios de la institución.

Mientras tanto, la vocera del mismo órgano, Diulka Pérez, salió en defensa de los folletos, alegando que la intención de la institución al incluir dichos textos, ha sido exclusivamente docente, detallando que se trata de artículos utilizados con el objetivo de que los alumnos hagan comparaciones y puedan generar un juicio crítico. “Son sencillamente ensayos para que los estudiantes saquen sus conclusiones y decidan, quién entiende tiene más elementos para sustentar la verdad”, agregó. Consideró que no hay razón para que alguien se sienta ofendido.

Medios de comunicación de República Dominicana aseguran que el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en compañía de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo (Usaid), financiaron y acompañaron la realización de los soportes educativos, y estas organizaciones lo confirmaron. Por otro lado, aseveran que los textos polémicos no fueron presentados a ellos y llaman a los medios de comunicación a corregir las afirmaciones que hacen.

“Las publicaciones aparecidas en algunos medios no son ciertas (…) Unicef y Usaid han apoyado el diseño de los cuadernillos desde pre-primaria hasta primer ciclo de secundaria (1º, 2º y 3º de secundaria). Sin embargo, el texto citado por medios como “controversial” se encuentra en un cuadernillo de sexto grado de secundaria que no fue aprobado por nosotros”, dijo Pérez.

“Este error en algunos medios puede ocasionar retrasos importantes en la producción de los cuadernillos desde pre-primaria hasta primer ciclo de secundaria, con lo cual más de un millón y medio de niños y niñas pueden ver interrumpida su formación”, sostuvo.

Es así como, una vez más, queda demostrado que el lobo no es el progresismo, ni el comunismo; sino los gobiernos que tienen la necesidad de quedar bien ante los grandes imperios y sus miedos a un mundo multipolar que cada vez es más posible tangible y real.