Imperialismo utiliza empresas multinacionales para atacar a gobiernos progresistas en Latinoamérica
Publicado: 05/05/2020 11:41 AM
La lucha
imperialista por adueñarse de los recursos naturales y estratégicos en América
Latina ha sido instrumentalizada desde ciertos gobiernos a través de empresas
transnacionales direccionada por el pentágono o centro del poder capitalista mundial
donde confluyen los más grandes asesinos letales de los pueblos y su medio
ambiente.
En este
sentido, el comportamiento de Odebrecht, consorcio o empresa trasnacional fue
una estrategia más del imperialismo estadounidense para obtener jugosos
contratos en divisas en la región latinoamericana, al tiempo que penetraban las
administraciones gubernamentales e inducían a la corrupción mediante sobornos a
presidente, ministros y grandes corporaciones que le permitiera involucrarlos
en acciones delictuales como elemento necesario para que el imperialismo
estadounidense a través de su sistema de justicia corrupto, inculpara a los altos
funcionarios de gobiernos progresistas latinoamericanos, como parte de esa
acostumbrada política injerencista en asuntos internos de los demás países.
Esta empresa transaccional
actuó como instrumento del imperialismo en la región convirtiéndose en el gran monopolio
constructor de América Latina, asumiendo como decimos en nuestra Venezuela bolivariana,
un rol de todeda, al realizar construcciones o remodelaciones estructurales de plantas
de energía, ferrocarriles, puertos, aeropuertos, minería, petroquímica,
plataformas de petróleo, gas, plantas nucleares, lo cual les generó miles de millones
de dólares en ganancias y al tiempo que ejecutaba su principal
mandato imperial de pagar sobornos súper millonarios a cambio de contratos
fuera del marco legal para involucrar a políticos de alto nivel entre los que
se mezclaron presidentes, parlamentarios, ministros en varios países de la
región.
Una vez que implicaban
a esos altos funcionarios, el gobierno de EEUU,
quien siempre se ha vanagloriado de tener moral, empezó a presionar a
los gobiernos neoliberales cipayos para que actuaran en contra del gobierno
venezolano, llevándolos a crear el fenecido Grupo de Lima quien se encargaría
de asediar desde la región con estrategias corrupta al presidente Venezolano,
en otros países como consecuencia de la misma actuación de la trasnacional Odebrecht,
construyeron casos para judicializar a expresidentes apartándolo del activismo
político y así colocar sus candidatos preferidos apegados a los lineamientos imperiales,
quienes le permitirían el saqueo de los recursos naturales.
No queda dudas
que son las empresas trasnacionales un verdadero instrumento de la política
exterior estadounidense para el ataque y defenestración de los gobiernos en el
mundo, simplemente por pensar de manera contraria a los intereses del
pentágono, quien en salvaguarda de su poderío mundial descuida la felicidad de
los pueblos al negarle las mínimas condiciones humanas de supervivencia.
RAFAEL SOSA VARGUILLA
@rafaeliginio