Menú

Buscar


Grupo de Lima: Estrategia imperial para desintegrar a países latinoamericanos

El imperialismo impulsa su peor estrategia de desestabilización regional mediante el Grupo de Lima
Internet

Publicado: 18/01/2019 03:16 PM

El imperialismo impulsa su peor estrategia de desestabilización regional mediante el Grupo de Lima, a quien le toco nacer en un país donde su principal gestor: El Señor Pedro Pablo Kuczynski (PPK) tuvo que renunciar por corrupción y fundamentalmente por la presión del pueblo oprimido por parte de esa oligarquía mantuana pro yanqui que somete a los peores sacrificios humanos a un pueblo originario preñado de amor por su terruño ancestral.

 

Pero la desgracia no termino ahí, ni para el Grupo de Lima, quien se ha convertido en la vergüenza Latinoamérica, ni para el pueblo peruano, pues la renuncia presidencial dejo en el poder a quien era vicepresidente, que también había sido acusado de corrupción, pero de cualquier manera hoy es el presidente de los peruanos, a quien por supuesto no eligieron por votación directa y secreta como en una verdadera democracia protagónica donde se eligió al presidente Nicolás Maduro, a quien Vizcaya trata de enlodar diciendo que no es legítimo.

 

El congreso peruano, con sede en la cuna del forajido Grupo de Lima es uno de los más putrefactos de la región, lejos de representar al pueblo representa a grandes capitales transnacionales, que al final es cuestión interna de ese país, cuya oligarquía junto a la colombiana viven inmiscuyéndose en los asuntos venezolanos, donde no existe oligarquías godas, que nieguen su verdadero origen como pueblo ni oculten a su real Libertador Simón Bolívar.

 

Es lamentable que no hayan aprendido de las ideas bolivarianas, de la humildad, inclusión e integración regional del propio Libertador Simón Bolívar a quien otorgaron la espada libertaria de Latinoamérica, lamentable que hoy tampoco quieran aprender de otro gran venezolano como Hugo Chávez, solo han sumergido a más de 2 millones de niños fuera del sistema escolar, 75% de los colegios mal construidos, 2 millones de jóvenes desempleados, 9 millones de peruanos sin aguas ni servicios de redes para las aguas servidas; además estos oligarcas peruanos han convertido a su país en guaridas de terroristas escuálidos fugados desde Venezuela, quienes están promoviendo un ejército venezolano-peruano con apoyo del gobierno de Vizcaya y de toda esa  oligarquía goda.

 

Y si de salud se trata en Perú vemos que más del 46% de los niños padece anemia, batiendo record latinoamericano en tuberculosis según datos de la Organización Mundial de la Salud, mientras su dirigencia política se empeña en destruir el bastión revolucionario, nacionalista y sobre todo latinoamericanista que emerge en Venezuela donde no ocurren esos desmanes de la salud de los niños; ese gobierno peruano jefe del Grupo de Lima, silencia descaradamente los asesinatos de los 235 líderes sociales en Colombia, donde existe un gobierno cómplice oligarca y pro yanqui, silencian los 300 palestinos asesinados por Israel, los 7 millones de muertos por causas de USA en África, los genocidios cometidos en Yemen y Afganistán y dan aquiescencia a gobiernos neoliberales pro fascistas en esta región.

 

Los que dirigen ese grupo como el presidente Vizcaya en Perú, Duque en Colombia y otros, quieren destruir la estrategia del Comandante eterno Hugo Chávez, visionario bolivariano que estratégicamente decidió la conformación de las milicias bolivarianas y la doctrina de la guerra de todo el pueblo para impedir al Pentágono declarar a todos los países latinoamericanos como Estados fallidos al servicio de sus intereses imperiales como ya lo logró con los integrantes del irrito Grupo de Lima.

 

Pretendían usar los preceptos de la guerra de cuarta generación arropando múltiples doctrinas como la guerra no convencional, irrestricta, híbrida, molecular, para lo cual han utilizado a Venezuela de laboratorio probando estrategias de tipo psicológico-político, dirigidas al terreno humano más que al territorio geográfico, puesto que para ellos el centro de gravedad primario no es militar, sino fundamentalmente de opinión pública y liderazgo.

 


RAFAEL SOSA VARGUILLA


@rafaeliginio