Publicado: 25/09/2024 10:00 PM

(EL NACIONAL + 2001, 20 DE SEPTIEMBRE 1984)

• Acerca de las cifras de La Masacre de Tazón, ocurrida exactamente hace 40 años, la prensa tradicional se quedó corta. En realidad, fueron más de 35 heridos abaleados por la Guardia Nacional.
• El número de heridos, cerca del peaje de Hoyo de la Puerta, hizo colapsar por tres días al Hospital de Coche y el Hospital Clínico Universitario.
• Fueron ingresados de emergencia 43 estudiantes, entre los más de 200 que se trasladaban a Caracas, y que fueron sorprendidos por la acción violenta de los efectivos militares.
• Lo sucedido, hace 40 años, involucró directamente al entonces ministro de Relaciones Interiores, Octavio Lepage; el mismo que el 26 de julio de 1976 declaró, con inusual talante, que Jorge Rodríguez padre falleció de muerte natural en una celda de la DISIP; quien también que fue acusado como autor intelectual del asesinato de 9 estudiantes en La Masacre de Yumare (08-05-1986), ejerciendo el mismo cargo.
• Los más de 200 jóvenes universitarios provenían de Maracay, en cuatro autobuses de la Facultad de Veterinaria y Agronomía, con el propósito de unirse a una protesta contra la eliminación de los beneficios estudiantiles que habían sido derogados por el gobierno de Jaime Lusinchi.
• La Confederación de Centros de Estudiantes Universitarios salió en defensa de los heridos, y a tal efecto convocó una manifestación general.
• Ese día, la Universidad Central de Venezuela fue el escenario de una cerrada balacera, donde funcionarios de la Policía Metropolitana arremetieron contra los estudiantes a fuerza de disparos, bombas lacrimógenas y cartuchos de perdigones envenenados con tuercas y metras.
• Esto dio como resultado, que ese día, un estudiante fuera asesinado por la policía en la Plaza de Las Tres Gracias. Se trataba del joven de 27 años, Douglas Armando Blanco, quien ingresó sin signos vitales al Hospital de Coche. Su nombre no aparece en los registros estadísticos de ajusticiados por la policía en la Cuarta República.
• Lepage justificó el uso desbordado de las fuerzas del orden público, declarando que los autobuses habían sido ametrallados, por órdenes suyas, debido a que los estudiantes los habían secuestrado.

REDACCIÓN MAZO